Piensa en un lugar que te fascine, tu lugar favorito en el mundo en el que pasarías horas y horas… ¿Lo tienes? Ahora imagínatelo cubierto de nieve… ¿Verdad que se multiplica su belleza?
Pues lo mismo pasa con las bodas y sus protagonistas; con la nieve y el frío como telón de fondo, colores fríos y tierra en la decoración y el novio y la novia vistiendo elengantísimos abrigos…Voilá! El día soñado. Las bodas en los meses de otoño e invierno son tendencia esta temporada y las novias que se apuntan a esta moda son las más trendy.
Para desnivelar la balanza de los que aún dudáis en la fecha y para reafirmar a los ya convencidos, en Columnazero Moda os damos claves y algunas ideas que servirán de punto de partida para el perfecto look en una maravillosa boda invernal.
La inspiración nos llega viendo las fotos de Audrey Hepburn vestida de blanco. Ella lo hizo dos veces, y con dos estilos completamente diferentes, pero en ambas ocasiones escogió vestidos de corte invernal y manga larga. Su clase y su estilo dejaban huella allá donde estuviese, y más aún en tan señaladas ocasiones.
La última en apuntarse a la moda ha sido Solange Knowles, y lo ha hecho con una boda de lo más original. No hay más que ver sus dos magníficas elecciones de vestuario para constatar que estilísticamente hablando, le da mil vueltas a su ostentosa hermana. Impresionante el vestido largo de Kenzo que cambió tras la ceremonia por un atrevido mono con capa incluida. Una romántica boda otoñal súper cool.
Lo que la pasarela propone son tejidos más firmes y menos vaporosos, las capas sustituyen en ocasiones a las largas colas como, los cuellos se cierran y los hombros se cubren sea con manga larga o tres cuartos.
Novia abrigada, novia afortunada… ¡Si es que lo dice el refrán! Para las novias que tengan que combatir el frío en su gran día, las propuestas son claras: abrigo de pelo para las clásicas y elegantes y chaqueta de punto para las románticas y atrevidas. Chaqueta, abrigo, estola, capa… Cuando el frío arrecia, toma medidas ¡Deslumbrarás! Y dirán aquello de “blanca y abrigada va la novia”.
La flor no tiene que ser el atemporal Cactus, ni tiene que ser de plástico, porque en invierno también hay magníficas flores de temporada. El ramo elegido debe ir parejo tanto a la época del año como al estilo de la novia. Y el invierno requiere ramos sencillos y colores tierra. Cierto es que los tonos pastel y blancos endulzan y acompañan siempre a la perfección la etérea estética de las novias; y los verdes (en su justa medida) son muy propicios en los ramos del navideño mes de diciembre.
Sin ninguna duda los ranúnculos son las flores más bonitas de la época, aunque también son magníficas la peonías por su finura y las rosas por su sofisticación, éstas últimas cada vez más de moda entre las novias. Para los centros de mesa, sólo un nombre: coles ornamentales, una extraña flor que únicamente se da en los meses del otoño y del invierno y que es sencillamente espectacular por su textura y su llamativo colorido ¡Pensarán que es parte del menú…!
Bufandas, manoplas y ¡Listo! Nos vamos de boda… ¡Ah! Otra ventaja del invierno es que no sólo habrá un beso para sellar el amor de los novios, a buen seguro que también habrá un prolongado y cálido abrazo…
Beatriz Dominguez
beti
24 noviembre, 2014 at 21:29
Alma
24 noviembre, 2014 at 21:31
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24 noviembre, 2014 at 23:42