
La ‘ciudad maravillosa’ está llena de atracciones turísticas que hacen que más de cinco millones de personas la visiten cada año. Sus impresionantes playas, sus monumentos, las calles que muestran la forma de vida carioca o las populares favelas caracterizan esta enorme ciudad, que dobla a Madrid en número de habitantes. Y todas estas maravillas se pueden ver desde las innumerables montañas y ‘morros’ que hay en Río de Janeiro. En ColumnaZero viajes recorremos la ciudad a través de las trilhas.
Una de las excursiones más impresionantes, o ‘trilhas’ (caminos en portugués), que es como se conocen allí, es la de Pedra Bonita. Se trata de un sendero sin muchas complicaciones ni obstáculos que se encuentra en el Parque Nacional de Tijuca. Es relativamente corta, pues no dura más de 40 minutos y en el punto de inicio hay una rampa desde donde se pueden realizar vuelos de ala delta y parapente. Una buena recomendación para quienes se inicien en estos recorridos.
La ‘trilha’ de los Dois Irmãos es, sin duda, una de las más bonitas. Es, aproximadamente, un kilómetro y medio de excursión que comienza en la comunidad de Vidigal y ofrece una vista impresionante de toda la Zona Sur de Río de Janeiro. Además, puedes ver también la favela de Rocinha, la más grande de Río de Janeiro y que se encuentra detrás de las montañas.
Pedra da Gávea, es considerada una de las más difíciles, ya que incluye un tramo de 30 metros de altura en los que es necesario escalar. Se encuentra también en el Parque Nacional de Tijuca y, a pesar de la dureza y la complicación de la excursión, desde sus 847 metros de altura la vista panorámica que ofrece de la zona sur y oeste de la ciudad es majestuosa.
La Vista Chinesa es una excursión de fácil acceso, puesto que está totalmente pavimentada. Se puede, incluso, hacer en bicicleta, aunque hay que tener en cuenta que es una subida continua. Es una construcción oriental erigida a principios del Siglo XX y está localizada también en el Parque Nacional de Tijuca. Además, en el trayecto puedes encontrar varias cascadas en las que el baño está permitido y que hace más ameno el camino.
La ‘trilha’ del Morro de Urca es una de las más fáciles y más conocidas de Río. Se encuentra en el barrio de Urca, en la estación del Pão de Açucar. Desde arriba alcanzas a ver toda la zona sur de la ciudad, el Cristo e incluso Niteroi, una ciudad separada por un puente de Río de Janeiro. El mejor momento del día para hacer la excursión es por la tarde, porque se puede ver una de las puestas de sol más impresionantes de Brasil.
Y para ver el Cristo, el monumento más famoso de Río de Janeiro, no solo puedes subir en un teleférico, sino que si te gustan las aventuras, realizar una ‘trilha’ en el Monte del Corcovado es la mejor opción. Son casi dos horas de trayecto, que es considerado de nivel medio-alto en dificultad. Por eso, lo mejor es contratar un guía. Además, la mejor opción es hacerla por la mañana ya que por la tarde el sol da contraluz y es más difícil tomar fotografías.
Patricia Terroba Oliván
@columnazero