
El Gobierno egipcio se plantea la idea de subastar sus maravillas arqueológicas referentes abriendo un concurso público por cinco años con objeto de combatir la crisis económica que atraviesa el país norteafricano. Las Pirámides de Guiza, la gran Esfinge o los templos de Luxor y Abu Simbel serían los principales enclaves que el gobierno consideraría alquilar.
Conscientes de su inestabilidad política actual y sus problemas internos de deuda, los superiores del gobierno egipcio han planteado la polémica idea de subastar la gestión de sus fortalezas arqueológicas en manos de inversores privados, publicaba el diario local Al Arabiya. El turismo, principal generador de ingresos en el país, vendía su cultura a más de 9.000.000 de turistas en 2006, y, era entonces, cuando las autoridades egipcias, desconocedoras de la inminente crisis económica que se cernía sobre el globo, fijaban el objetivo de alcanzar los 16 millones en el 2014.
Al hilo de esto y, siendo conscientes del potencial de un país que cuenta con conjuntos de restos arqueológicos de una de las civilizaciones más influyentes de la historia del hombre, el gobierno del país calcula que podría obtener 200.000 millones de dólares (153.938 millones de euros) con el arrendamiento de estas piezas de renombre mundial a touroperadores internacionales:
- Las pirámides de Guiza: las tumbas de los faraones Keops, Kefrén y Micerino. Su construcción se remonta al periodo denominado Imperio Antiguo de Egipto, siendo la Gran Pirámide de Guiza, construida por Keops (Jufu), una de las siete Maravillas del Mundo.
- La Gran Esfinge de Guiza: situada a 20 kilómetros de El Cairo, es una escultura de proporciones monumentales en la ribera occidental del Nilo, esculpida en una reserva de roca caliza. 57 metros de longitud y casi 20 de altura dan forma a lo que se cree que es el rostro del faraón Kefrén con cuerpo de león.
- El Templo de Lúxor: realizado con el Imperio Nuevo sobre las ruinas de la ciudad de Tebas, contaba con dos dromos, dos grandes obeliscos situados a la entrada del templo (uno de ellos trasladado a la Plaza de la Concordia de París en el 1833) y dos grandes pilonos del monarca Ramsés II.
- Abu Simbel: situado en Nubia, al sur de Egipto, se trata de dos templos excavados en el siglo XIII a.C. como monumento dedicado a Ramsés II y su esposa Nefertari. En 1968, el complejo fue trasladado en su totalidad a una colina artificial a más altura para evitar que quedara sumergido después de la construcción de la presa de Asuán. Sus cuatro imponentes estatuas de Ramsés II esculpidas en la roca de la fachada son el principal atractivo del enclave.
Hasta ahora y según Adel Abdel Sattar, el secretario general del Consejo Supremo de Antigüedades, se trata solo de una propuesta del Gobierno, y niega que países de Oriente Medio con poder como Catar tengan relación alguna con el negocio.
Ante esta curiosa propuesta de alquiler, el pueblo egipcio no ha acogido la iniciativa con entusiasmo pues, según sus relatos, sienten que su cultura, historia y herencia vayan a ser alienadas.
Alberto Avellana
@albergamkee