El partido del año, del siglo, del milenio… Son tantos los nombres apocalípticos que le han puesto a este partido, que da la sensación que la prensa ya les ha agotado todos. El sábado Real Madrid y Barcelona saltarán al campo del Santiago Bernabeu con buenas sensaciones, pero con bastantes preguntas sin respuesta. Los dos equipos han cogido velocidad de crucero en la Liga, y tienen prácticamente solventada su clasificación para la siguiente fase en Champions.
El problema para ellos es relativamente nuevo: desde que el reparto televisivo igualó fuerzas en Inglaterra, Madrid y Barca, con sus contratos televisivos astronómicos comparados con el resto de los equipos de la Liga, viven instalados en una atalaya de ingresos desbordantes. Hay pocos partidos en el calendario que realmente, supongan una piedra de toque para saber cómo se encuentran realmente los dos equipos.
Contra el 80% de los Clubes Españoles y Europeos, estos dos equipos se pueden permitir jugar a medio gas y acabar goleando.
Sólo el irreductible Atlético de Madrid ha sido capaz de plantarles cara en el último año. Pero en el Atlético, los ingresos no son los mismos y este último verano, ha tenido que rehacer la plantilla con la que fue campeón. Las importantes bajas y el tiempo que lleva la integración de los numerosos refuerzos, hacen una vez más, que Madrid y Barcelona parezcan los dos grandes favoritos.
Real Madrid: “Ancelotti y la cuadratura del círculo”.
El Madrid gana en Anfield completando uno de los mejores partidos de los últimos años, y cuando a la mayoría de la prensa escrita se le resuelven todas las dudas, en ColumnaZero se nos acumulan más que nunca.
El Madrid jugó con Modric y Kroos en el medio y con dos interiores, Isco y James, en una solución que parece sentarle muy bien al equipo. El año pasado, Ancelotti realizó una jugada de maestro al integrar a Di María en el centro del campo. Su trabajo incansable permitió lucir a Cristiano, Benzema y Bale jugando juntos arriba, tres jugadores bastante menos activos en el esfuerzo defensivo.
Pese a que Isco y James van mejorando en tareas defensivas, aún parecen lejos de la aportación que sumaba Di María, al que el Presidente decidió traspasar en otra de esas decisiones que dejan al aficionado sin saber muy bien por qué. Y es aquí donde surgen las dudas… Gareth Bale no jugó en Anfield por problemas físicos, pero se le supone recuperado para el clásico, así que, lo que le tocará a Ancelotti es “cuadrar el círculo nuevamente”.
Si prescinde de Isco y juega con la BBC (Benzema, Bale, Cristiano), el Barcelona parece más que capacitado para hacerle pagar al Madrid su inferioridad numérica en el centro del campo.
Si mantiene a los dos interiores y decide sacrificar a Benzema, la solución que más gusta a buena parte de la prensa Madrileña, el Madrid puede encontrase con problemas para Cristiano y Bale. Estos dos jugadores tienen tanta facilidad para crear para sí mismos, como dificultades para encontrar al compañero mejor colocado.
La solución más factible parece ser prescindir de Bale nuevamente. Eso sí, habrá que ver como acepta un fichaje de muchos millones de euros, que la mejor versión de su equipo sea con él… en el banquillo.
En las últimas horas se rumorea una nueva posibilidad que a nosotros nos parece difícil de concebir, la inclusión de Khedira en el centro del campo. No apostamos por ello, pero como Ancelotti recuerda muchas veces, le gusta que sus equipos jueguen bien, pero no deja de ser un entrenador Italiano.
F.C. Barcelona: “Luis Enrique se encuentra, Zubizarreta se pierde”.
Luis Enrique parece haber disipado dudas en este inicio de temporada. El Barcelona funciona desde el inicio, la sociedad Messi-Neymar se ha establecido como una pesadilla para las defensas rivales. El equipo parece ensamblado desde el principio para que la aparición de Luis Suárez, un genio del balón cuya cabeza a veces tiende al cortocircuito, sea lo menos traumática posible.
Los caprichos del destino han hecho que el primer partido en el que el Uruguayo pueda ser utilizado por Luis Enrique, sea el clásico. De la calidad de Luis Suárez es difícil dudar, y pese a que éste haya conseguido marcar con su selección en enfrentamientos contra países exóticos, parece difícil imaginarle de la partida. La lógica dicta que si tiene minutos, los disfrutará en la segunda parte.
Pero sin duda, el factor más difícil de pronosticar a priori de este inicio de campana del Barcelona, es su solidez defensiva. Ni un sólo gol encajado en Liga. Una estadística bastante enigmática, ya que es ahí, donde parecen empezar y terminar los problemas de este equipo. Andoni Zubizarreta, para muchos, entre los que nos incluimos, ha construido un gigante con pies de barro.
La debacle del año pasado hacía que el Director Deportivo del F.C. Barcelona, tuviese que abordar 4 tareas que no se podían aplazar: Encontrar un recambio para Alves en el lateral derecho, sustituir a Víctor Valdés, reforzar el eje de la defensa y sumar algún refuerzo para refrescar la parte de arriba del equipo.
Los fichajes de Rakitic y Luis Suárez, a pesar de que este aún no haya debutado, parecen irreprochables, y la elección en la portería, también parece segura. Sobre todo por un Ter Stegen que con el tiempo, debería acabar cogiendo más vuelo que un aplicado Claudio Bravo….
Pero los movimientos en la línea defensiva parecen temerarios:
- En el clásico del año pasado, el Madrid superó sus dificultades en la construcción volcándose una y otra vez, por la banda de un superado Dani Alves, que volverá a ser titular en el Bernabeu.
- El otro damnificado de aquel partido fue un, casi siempre eficiente, Javier Mascherano, que mostró que cuando en vez de mediocentro jugaba de central, sufría demasiado….
La solución de Zubizarreta, gastar 20 millones de euros en Mathieu, un lateral izquierdo de más de 30 años que sólo había jugado de central en contadas ocasiones.
- Vermaelen, aún lesionado, puede convertirse en la gran esperanza de la zaga Blaugrana si sufre un traspié en el clásico. Recordad, que este central, era suplente en el Arsenal de Mertesacker, un jugador bastante limitado en algunas tareas del juego.
Puede que haya algún factor que se escape a la prensa, que Bartra en verano por fin diese un paso adelante, o que haya alguna joya en la cantera que pueda tapar ese hueco. Pero la gestión de Zubizarreta en la reestructuración de la defensa barcelonista, parece más que cuestionable.
En todos los clásicos es difícil realizar un pronóstico, pero este parece el más abierto a la especulación de los últimos años. El Barcelona parece haberle tomado la medida al Madrid en el Bernabeu, pero por mucho que digan las estadísticas, parece difícil pensar que el Barcelona no sufrirá en defensa ante el Madrid. También parece difícil que al Madrid no se le vuelva a atragantar el movimiento de balón a un toque de los culés en el centro del campo.
Sábado a las 18:00h, algunas certezas, muchas dudas, gran partido…Real Madrid-Barcelona.
Pablo García Lanza
El Madrid le va meter 7