Magia, sueño, fantasía, deseo…No hay palabras para poder expresar el poder de un par de zapatos de Manolo Blahnik. Sus diseños están llenos de viveza y, sobre todo, de la elegancia que incitan a presumirlos.
Manolo Blahnik es el escultor de la moda que nos permite sentirnos poderosas arriba de sus tacones. El secreto que esconde es la combinación de feminidad y sensualidad que no se ata a las tendencias ni al juego de las marcas.
En el año 2000 sus diseños se convirtieron en los más deseados e influyentes para mujeres entre 25 y 55 años con la interpretación de Carrie Bradshaw en Sex and the City cuando un ladrón la estaba atracando en pleno Manhattan y le gritó “Llévate mi bolso, mi anillo y mi reloj, pero por favor no te lleves mis Manolo Blahnik”. El ladrón huyó con sus zapatos, pero tiempo después, a Carrie también le pidieron matrimonio con uno de sus zapatos favoritos, el modelo Hangisi, de raso azul royal, con hebilla de Swarovski.
La colección para el otoño-invierno 2014-2015 trae algunos elementos que la distinguen de otras marcas. En cuanto a las formas, destacan los zapatos planos, bailarinas y botines y sobre todo, los zapatos de tacón de aguja. El diseñador siempre se ha distinguido por el uso de colores innovadores. En esta colección ha decidido apostar por zapatos damascos, florecidos con rojo, oro, amarillo, azul y rosa. Además del contraste de dos colores: blanco y negro, azul-blanco y negro-coral. Si tu debilidad son los zapatos no podrás resistirte a los diseños del creador canario.
Los zapatos diseñados y hechos de forma artesanal son una de esas pequeñas obras de arte deseadas por cantantes, actrices, modelos, aristócratas y millonarias de toda estirpe, capaces de gastar una fortuna por conseguir uno de los originales modelos del artista. Entre las seguidoras más conocidas destacan Julia Roberts, Giselle Bündchen, Kate Moss, Naomi Campbell, Linda Evangelista, Carolina de Mónaco, Carolina Herrera, Paloma Picasso y Bianca Jagger.
En 2005, el diseñador inauguró su primera tienda en Madrid, exactamente en la calle Serrano. Sin embargo, no era suficiente para abastecer la gran demanda de las seguidoras y seis años más tarde abrió su segunda tienda en Barcelona.
No es tarea fácil hacerse con un par de Manolos a pesar de que el precio oscila entre unos 1.100 euros los más baratos y hasta más de 6.000, los modelos exclusivos. Pueden transcurrir varios meses para obtenerlos ya que su proceso es totalmente artesanal.
Después de plasmar en un papel el modelo que ha sido diseñado previamente, se esculpe la idea en un pedazo de madera. A continuación, en un molde de plástico el autor da rienda suelta a su imaginación, mezclando texturas y colores. Una vez hecho el prototipo, éste es destinado a la fábrica instalada en Italia, donde pasa por 50 procesos de producción. Y es precisamente en ese trabajo manual donde radica el encanto de estos zapatos. De ahí que muchos piensen que “la vida se ve mejor desde un par de Manolos“.
Desirée Castillo Santiago
@DesireCastillo