GASTROFITNESS: BROWNIE

Apostamos por un clásico; el brownie. Con el sabor y textura de siempre pero con una importante reducción de calorías en cada ración. Un postre 10 para conseguir un cuerpo 10.

Un postre para todos los públicos, dedicado especialmente a los más golosos. La muestra de que no es preciso renunciar a nada, que basta con tirar de imaginación y lógica. La ventaja que nos ofrece este brownie con respecto al tradicional es una reducción drástica de los azúcares refinados y grasas saturadas, así como un aumento de la cantidad de proteínas del más alto valor biólogico (del que hablaremos muy pronto en nuevas entradas); y es que como fuentes esenciales de proteína utilizaremos:

- Concentrado de proteína de lactosuero: 100g de proteína extraída del suero de la leche. Una fuente de rapidísima absorción y con un valor biológico altísimo. Su consumo no es sólo sano, sino que en la actualidad es pautado por gran parte de la comunidad médica para pacientes con muy diversas patologías. La ciencia y la nutrición avanzan, y debemos obviar las anticuadas concepciones populares que relacionaban esta fuente proteica con los esteroides anabolizantes. Nada más lejos de la realidad. Niveles de hasta 105 en los test de valor biológico.

- Claras de huevo: El aminograma de los huevos en general es de los más completos. Para esta receta utilizaremos unos 250g sólo de claras de huevo (10g proteína/ 100g) y un valor biológico de entre 86 y 90.

- Otras fuentes: Avena, nueces y el cacao puro desgrasado aseguran un correcto aporte.

Ingredientes para 6 raciones

• 120 g harina de avena/avena molida
• 100 g proteína en polvo (WPC) sabor chocolate
• 20g cacao puro desgrasado
• 250g de claras de huevo (unas 5 claras)
• 250g de leche desnatada (preferiblemente sin lactosa)
• 40g nueces
• 8 g de levadura química (medio sobre aprox)
• Edulcorante/Stevia al gusto

Elaboración

1. Batimos las claras y cuando estén a medio montar, añadimos el edulcorante. Seguimos montando hasta dejarlas a punto de nieve y reservamos. ¡Dadle caña a esos brazos!
2. En un recipiente o shaker mezclamos la leche con la avena, la proteína de suero, la levadura y el cacao. Batimos bien para que no queden grumos.
3. Precalentamos el horno a 180ºC.
4. Incorporamos la mezcla del shaker a las claras montadas. Corregimos de dulzor con el edulcorante o de amargor con el cacao en polvo. La mezcla debe ser espesa.
5. Machacamos las nueces y reservamos.
6. Vertimos la mezcla total en un molde de silicona, en un molde antiadherente o en una fuente cubierta de papel vegetal.
7. Echamos las nueces por encima de nuestro “casi” brownie de manera que algunos trozos se irán hundiendo.
8. Opcional: Espolvoreamos un poco de cacao desgrasado por encima del brownie.
9. Lo introducimos en el horno a 180ºC durante unos 20-25 minutos.
10. Dejamos enfriar. Opcional: Añadimos salsa de chocolate-cacahuete Walden Farms.

*El consejo del Chef: El brownie estará listo cuando clavemos un cuchillo y éste salga limpio, aunque podemos dejarlo un poco más líquido por dentro como si fuera un coulant recortando ligeramente el tiempo de horneado. Otra forma deliciosa de saborear este plato.

Nos interesa que el recipiente tenga una buena superficie. Debemos evitar que sea demasiado profundo No resultará muy estético un brownie de 12 centímetros de espesor. 3-4 cm es lo óptimo.

Desglose de macronutrientes

Pues estos pasos tan sencillos son los que debéis seguir para obtener un plato sano y delicioso. Aunque tradicionalmente se toma como postre, esta versión se hace ideal para comer a cualquier hora del día, especialmente entre horas y como complemento a la primera comida post entreno. Amantes del chocolate, al ataque.

Nos leemos en la próxima entrega de Gastrofitness con otra receta sabrosísima. Stay tuned!

Adrián Guerrero

Alex Fernández (@alex_pacino_)

Fotografía: Julio Paniagua (@PaniaguaPhoto)