“Buscaba qué tipo de cine estaba preparado a hacer. Me sentía muy lejos de aquellas obras maestras en todos los sentidos y MAPA refleja que no solo no compartía esa forma militar de producción, sino que la película está configurada sin orden cronológico y desde un desorden mental inicial: ahí fue cuando me di cuenta que ese era mi método”. León Siminiani.
MAPA es una película con una estructura de producción totalmente atípica hasta entonces, un film que aúna conceptos básicos del séptimo arte guiados por un maestro de orquesta que debutaba por entonces con una idea demasiado arriesgada para los tiempos que corren. ColumnaZero estuvo con Elías León Siminiani a su paso por la Universidad Carlos III de Madrid para que nos contase de primera mano los mejores secretos de su ópera prima.
Victor Marfil. La película está grabada en 4:3. ¿Por qué elegiste este formato en desuso?
L.S. Se grabó en formato 4:3 porque así lo dictaminaba mi imaginario personal. MAPA, en cierta medida habla sobre mi vida, y era muy importante el efecto de 4:3 ya que me siento identificado con las grabaciones domésticas de los 90. Sin este formato hubiera sido imposible entender el concepto de la película.”
VM. En MAPA existe una doble narración llevada por la misma persona: director y protagonista. ¿Cómo se digiere esa separación de facetas en una película mayoritariamente autobiográfica?
LS. Fue uno de los puntos más complicados de la película. Separar el director del protagonista fue uno de los grandes problemas porque dudas en el interés del espectador de tu vida: en esta película hay un personaje que está siempre perdido, pero el director, a su vez, no debía perderse y seguir manteniendo el sentido común dentro de la narración. “El Otro” es un camino de desdoblamiento muy fértil, donde estas líneas parecen diluirse por segundos. Aunque fuera mi vida la que estuviese ahí, yo debía construir una historia, con objetivos claros y una estructura sólida.
VM. Una película documental y además española, ¿Cómo fue tu experiencia junto a la productora AVALON?
LS. Cuando la película estaba terminada no sabíamos encajarla y tuvo el rechazo en muchos festivales con un comienzo bastante complicado. El primer debate fue si iba o no a salas, ya que los cines no compraban un documental, español, y además por alguien desconocido. Finalmente salió en dos salas únicamente (Madrid y Donosti) y parece que funcionó bien. Se hizo un pequeño tour por distintas salas de España donde iba a todas las presentaciones haciendo el mismo discurso una y otra vez. Fue la única forma de llegar al público ya que era imposible estrenar en varias salas a la vez. Me supuso un gran gasto económico y físico donde nunca se me aseguró la recaudación. Después de casi un año, MAPA pasó de exhibirse en dos salas a más de 15 con una recaudación que superó los 40.000€ solo en taquilla.
VM. ¿No tuviste pudor en mostrar tu vida reflejada en una película que se exhibe en tantas salas de España?
LS. Nunca tuve pudor en mostrar mi realidad al público, tal vez pueda parecer vanidoso, exhibicionista o egocéntrico, pero por otro lado estaba muy acostumbrado a este tipo de filmaciones. Tal vez al principio del montaje, puntualmente, tuve ese pudor de contar cosas tan personales como mi vida sentimental o que tuve un accidente de coche en el que casi pierdo la vida; pero pienso que si algo te da mucho palo contar es que es bueno, es oro contar algo que es tan fuerte que te cuesta hasta escribirlo, pero no hay que forzar en sacarlo si no estas preparado. Hoy en día la gente cuenta su vida cada cinco minutos actualizando su estado en las redes sociales y no tiene pudor de ello.
VM. Tu relación con la India
LS. Cuando fui a la India no tenía ni idea del país. Fui como indico en la película, estaba buscándome, pero cuando voy avanzando me doy cuenta que no podía hacer una película sobre la India, y no solo porque no tenía ni idea del país, sino porque ya se habían hecho muchas y muy buenas películas sobre este país; aparte de que si tú vas a la India y dices que vas a hacer un documental no te dan el visado ya que hay muchas cosas que no les interesan que grabes y más ahora que están potenciando la economía emergente y el Bollywood. La película no va sobre la India, tiene a la India como espejo de fondo para contar la historia de un personaje. De hecho pienso que tengo una cierta deuda con la India que espero algún día poder devolverla.
VM. Además del largometraje, la pieza de vídeo sobre el pasado mundial de 2010 ha sido la más vista y reconocida por el público. ¿Qué nos podrías contar de ella?
LS. Tenía mucho miedo al yoísmo, algo egocentrísta. Lo que hice fue grabar muchas cosas fuera de mi película y de ahí salió unos clips como el del mundial. Aunque poco a poco el peso del personaje fue cogiendo más fuerza y lo tuve que quitar.
“Particularmente de este vídeo, se juega mucho con el silencio, ya que cuando no hablas, la imagen recupera una importancia mucho mayor que cuando hay diálogo. El arte de esculpir las imágenes con palabras y filtrar tus intenciones para llevar al espectador donde tú quieres es muy complicado.” León Siminiani.
Víctor Marfil
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