C’est fini. Los días pasaron en San Sebastián como aves migratorias que no conciben el descenso. El viento y la lluvia saludaron a los visitantes y desaparecieron con celeridad. La alfombra roja, sin perder colorido, recibió a Sienna Miller, Luke Evans, Luis Tosar, Agustí Villaronga, Barbara Lennie, Pedro Almodóvar y Ellen Page, entre otras célebres personalidades. Y un día después del último adiós los paseantes anónimos tomaron la ciudad.
A las nueve de la noche del pasado sábado dio comienzo la ceremonia de clausura. Durante el acto fueron entregados los premios de tres categorías: Horizontes Latinos, selección de películas del año 2015 producidas en Latinoamérica, Nuevos Directores, dedicada a cineastas noveles, y la Sección Oficial, cuyo ganador -el film islandés Sparrows de Rúnar Rúnarsson- obtuvo la Concha de Oro de la sexagésimo tercera edición del Festival de San Sebastián. Así mismo fue concedido el Premio del Público, dotado con cincuenta mil euros, a la película Nuestra pequeña hermana del director japonés Hirokazu Koreeda.
Sparrows -descrita a grandes rasgos en la primera crónica del festival- es una obra turbadora que trata sobre la adaptación de un adolescente a un entorno rural gélido y rocoso. El film narra con minuciosa frialdad las costumbres de los habitantes de una desolada región del noroeste de Islandia. Un relato sostenido por la tensión que genera el deseo de encontrar un interlocutor en un territorio ubicado en la última frontera de la civilización.
En los últimos días del festival presenciamos películas colmadas de vitalidad. Entre ellas Amama de Asier Altuna (galardonada con el Premio Irizar), una contenida historia familiar que el periódico digital Infolibre describe como “un poema vasco hecho de silencios”. High-Rise de Ben Wheatley, una estrafalaria metáfora de la degeneración del capitalismo -denostada por una abrumadora mayoría de espectadores- que, en mi opinión, derrocha tanta vanidad como magnetismo. El film combina el cine de Guy Ritchie con el cine de Luis Buñuel, creando un cóctel de sabor exótico. También asistimos a la presentación de la nueva película de Agustí Villaronga, El rey de la Habana, un relato picaresco, crudo y en ocasiones esperpéntico, situado en la Cuba de la década de los noventa. La temperamental protagonista del film, Yordanka Ariosa, recibió la Concha de Plata a la Mejor Actriz. En el octavo día coincidieron dos de las mejores películas de la sección: Un dia perfecte per volar de Marc Recha y London Road de Rufus Norris. La primera es una obra sencilla y cautivadora que respira como un organismo vivo gracias a la soberbia actuación de Sergi López. La segunda, opuesta en forma y contenido, es un híbrido, mitad musical, mitad thriller, que compone una deliciosa miscelánea de humor británico.
En el interior de las ostras cantábricas descubrimos Perlas como Son of Saul, una asombrosa película húngara, ganadora del Gran Premio del Jurado del Festival de Cannes, ambientada en el Auschwitz de 1944 y dirigida por el debutante László Nemes. En la misma categoría fue presentada Irrational Man de Woody Allen, una templada comedia existencialista, cercana en la temática a la obra del escritor ruso Fiódor Dostoyevski, pero distanciada en el tono. Y también la nueva película del prestigioso guionista Charlie Kaufman que firma una deslumbrante obra de animación sobre las relaciones esporádicas y el alivio de la soledad que recibe el título de Anomalisa.
Ricardo Darín y Javier amanecieron el domingo con la Concha de Plata adornando la mesilla de noche por una espléndida actuación en la película Truman de Cesc Gay. Un cálido despertar que también disfrutó la magnífica actriz británica Emily Watson, ganadora del Premio Donostia en la presente edición. El resto de nosotros, que formamos la concurrencia y que durante nueve días nos divertimos como niños que estrenan una bicicleta, nos despedimos de San Sebastián escuchando un aplauso que cesa y una ola que rompe.
Palmarés Oficial
-Concha de Oro a la Mejor Película: Sparrows de Rúnar Rúnarsson.
-Premio Especial del Jurado: Evolution de Lucile Hadzihalilovic.
-Concha de Plata a la Mejor Dirección: The white knights de Joachim Lafosse.
-Concha de Plata a la Mejor Actriz: Yordanka Ariosa por El rey de La Habana.
-Concha de Plata al Mejor Actor: Ricardo Darín y Javier Cámara (ex aequo) por Truman.
-Premio del Jurado a la Mejor Fotografía: Manu Dacosse por Evolution.
-Premio del Jurado al Mejor Guión: Arnaud Larrieu y Jean-Marie Larrieu por 21 Nights with Pattie.
-Mención Especial del Jurado: El Apóstata de Federico Veiroj.
Adrián Abril (@PublioElio_)
@ColumnaZeroCine