Su aerodinámica forma y su estudiada estructura evitan el Síndrome del Túnel Carpiano que llegan a producir los dispositivos comunes. Levita hasta los 10 milímetros. Junto al teclado Dvorak, suponen un remedio saludable a las largas jornadas laborales.
Las horas y horas trabajando frente al ordenador en una fatigada jornada laboral parecen ahora tener menos consecuencias en nuestra salud. Desde hace años se esperaba un ratón capaz de evitar el Síndrome del Túnel Carpiano, aquel que se produce por la postura de la muñeca al mover el ratón durante mucho tiempo, de tal forma que el nervio mediano se presiona dentro del túnel carpiano, produciendo un incómodo malestar protagonizado por calambres, entumecimiento y adormecimiento de la mano. Para aquellos usuarios que sufren Síndrome del Túnel Carpiano de modo crónico, los profesionales recomiendan el uso del teclado Dvorak, cuya disposición de las teclas minimiza los movimientos para escribir textos.
El ratón Bat está formado por una base magnética y un anillo donde el ratón es capaz de levitar hasta 10 milímetros para ajustarse a la forma de la muñeca. El dispositivo soporta hasta un 1kg de peso y consigue flotar gracias al sistema de imanes con los que cuenta.
Diseñado por Vadim Kibardin, aún no se encuentra en el mercado; aunque se encuentra en un avanzado estudio de viabilidad en varios países que hace pensar que próximamente saldrá a la venta.
