Algunas de las películas de terror más famosas han pagado un duro precio por su éxito. ¿Extrañas coincidencias o espeluznantes consecuencias? He aquí un ejemplo de cómo a veces la realidad supera a la ficción.
El exorcista:
Varios acontecimientos extraños y misteriosos fueron los ocurridos durante el rodaje de esta película. El primer día de rodaje comenzó con 3 muertes: muere el abuelo de la actriz que encarna a Reagan (Linda Blair), el hermano del actor que interpretaba al Padre Merrin (Max Von Sydow) y el hijo del regidor con tan sólo un día de vida.
A esto le añadimos varios incendios del estudio de la Warner sin motivo aparente de la causa, provocando la muerte de distintos trabajadores. A pesar de obligar a un cura a bendecir el estudio de trabajo, se volvieron a dar casos de muerte e incluso tuvieron que cambiar el guión al morir el actor Jack McGuhan de un ataque al corazón. Pero el hecho más escalofriante fue la muerte de la niña poseída Mary Ure a la cual encontraron en el camerino de brazos cruzados y cubierta de vómito:, no pudo iniciar la segunda función.
Poltergeist:
Distintos casos fueron los que superaron la ficción en esta película al poco tiempo de rodar. Doce años tenía la actriz secundaria de Poltergeist III, Heather O`Rourke cuando murió por causa de una enfermedad rara y repentina: estenosis múltiple. Asimismo, el actor Will Sampson conocido en la segunda parte de la película por interpretar a un curandero, sufrió un cáncer que le arrebato la vida.
La actriz Dominique Dunne, la hija adolescente de la familia, fue asesinada por su novio a poco tiempo del estreno de la película de la primera parte.
A su vez, al malvado sacerdote de la segunda parte interpretado por Julian Berk, le diagnosticaron una enfermedad misteriosa y extraña que pocas semanas después le llevó a la muerte.
La profecía:
Durante el rodaje de esta película fueron muchas las coincidencias impactantes que se dieron lugar. El famoso actor Gregory Peck que dio vida a Robert Thom, cogió un vuelo en el cual su avión fue alcanzado por un rayo, pero lo más asombroso es que tres días después, el escritor y director -David Stelzer - cogió el mismo vuelo y también fue alcanzado por un rayo.
El rodaje también estuvo marcado por un hecho escabroso. El equipo presenció, un atentado tribuido al IRA en la estación de metro más cercana al hotel donde se alojaban los miembros de la película.
Además, el técnico encargado de los efectos especiales John Richardson, sufrió la repentina muerte de su novia, decapitada en un accidente de coche dice a la altura “Lieja 66,6 km” (el número del diablo).
Espero no correr la misma suerte por escribir esto…
Paula Celemín Ballesteros @pauceba5
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