
Como cada año, en breve empezarán los balances de todo lo bueno y jaranero que fue el 2015. Pero aún nos quedan días para comernos diciembre (y lo que surja) y empezar el invierno con los deberes hechos, así que si uno de vuestros propósitos para 2016 es que no os repitan más eso de: “¿Aún no lo has probado? (cara de incredulidad), no podéis perderos la lista de restaurantes que os traemos con los imprescindibles de este invierno en Madrid.
Como suele ser habitual, la capital es un hervidero de nuevas aperturas, lavados de cara de locales y propuestas renovadas (la vida del foodie es un no parar). No pretendemos vaticinar, pero ojo que La Bien Aparecida tiene todas las papeletas para convertirse en EL restaurante de este invierno en Madrid. Paco Quirós se marca un triplete (tras La Maruca y Cañadío) con este nuevo local en la calle Jorge Juan que lleva el nombre de la patrona de Cantabria. Un interiorismo espectacular (de la mano de Sandra Tarruella) y una cocina abundante y reconocible, le hacen tener todas las papeletas para que tengáis que probarlo ya.

Otro que ya cuelga el cartel de “siempre lleno” es Perrachica, la última ocurrencia del Grupo Larrumba que parece haber encontrado la fórmula mágica para conseguir tener a tope cada uno de sus locales en la capital (y ya van 5). El interiorismo con decoración pro-instagramera, la carta facilona y la gente guapa que lo frecuenta, hará muy complicado que queráis perdéroslo. Abierto hace nada también lo último de los Arzábal: “A” Japanese Kirikata, un restaurante japonés con alma londinense y espíritu de taberna (sí, sólo a ellos se les podría ocurrir algo así). La clave del proyecto radica en enfatizar la calidad del producto y el cuidado que pone en cada pieza su sushiman Luis Sánchez; eso sí, en la carta no faltan sus propuestas tradicionales sencillas de comer como embutidos, croquetas,… Todo esto podréis acompañarlo con sus más de 250 referencias de destilados, vamos, que opciones hay para todos los gustos.

The Table by está instalado por segunda temporada en el Hotel Urso para seguir ofreciéndonos gustazos como ha sido Regueiro (y sus comentadas croquetas; sí, estaban muy buenas!) y ya tenemos aquí a Andreu Genestra con unos menús que ante todo, apetecen (hasta el 23 de diciembre). Y para conceptos efímeros, lo del Señor Bonet en Ponzano con MUTA y su recién inaugurado Smoking Club (su mejor ocurrencia, dicen, hasta la fecha); aquí la carne la ofrecen asada con humo muy lentamente, y palabra que merece la pena probarla.
A Pepe Solla también tendréis que hacerle una visita en Atlántico, su local en la calle Velázquez con aire informal y sabor gallego. Con zona de mesas altas para aperitivear desde conservas gourmet a embutidos de la tierra como el lacón y la cecina, y zona de comedor al fondo con espíritu de lonja gallega. Platos de bonito, navajas, pulpo, empanadas…os están esperando. Influencias atlánticas (gallegas y portuguesas para ser más exactos) también en Atlantik Corner, la aventura gastronómica de Nuno de Noronha en el Barrio de las Letras, que promete un Bacalhau a brás casero que bien merece la visita.

El Barrio de las Salesas ha sido el elegido por Natalia Jumnaklap (creadora de Krachai) para abrir Wilbran, un local donde recupera recetas mediterráneas que fusiona hábilmente con la cocina asiática. Aquí podréis disfrutar desde un aperitivo en la zona de mesas altas a una cena tranquila en su comedor, incluso tomar unas copas en la zona de barra: propuesta versátil de las que nos gustan. Y para fusión asiática, el novísimo Pink Monkey (del equipo de Asiana Next Door) con una carta entre la que encontrar baos, dumplings y los deliciosos cócteles de Alexis. Lo mejor: que abrió hace apenas una semana y el libro de reservas aún no echa humo (aprovechad).

Y para terminar (puntualizar que son todos los que están, pero no están todos los que son), Random, lo más urban chic del grupo Le Cocó. Un espacio diseñado en tres alturas bajo el sello inconfundible de Madrid in Love: varios salones, bistró y hasta un club clandestino en el sótano de donde no podéis iros sin probar alguno de los cócteles de su carta diseñada por Doru Timoce. Huele a llenazo.

Seguiremos informando, hasta entonces… id reservando. Y que las cenas de Navidad nos pillen confesados.
Beatriz Cámara
@columnazero