
Con la revolución de las redes sociales los empresarios han encontrado una nueva e innovadora vía para promocionar sus productos y/o servicios. Su poder adquiere tal envergadura que es capaz de viralizar fotografías, vídeos y difundir informaciones alrededor del mundo en cuestión de segundos. Pero todo esto puede tener un lado negativo si no contamos con una buena gestión que evite que nuestra imagen de marca se vea perjudicada.
Hasta tal punto llega la importancia del marketing online que muchas empresas ya están especializadas en este ámbito para ofrecer a las compañías sus conocimientos y mejorar así los datos globales, en cuanto a impacto social y ventas en sí. Por ejemplo, generar contenido relacionado con este campo para resolver los conflictos que se presenten mediante una metodología específica, con el objetivo de renovar la trayectoria y estadísticas del cliente. Aunque no paramos de oír hablar de lo imprescindible que es hoy en día contar con un óptimo posicionamiento web y que la gente nos conozca y, sobre todo, reconozca nuestro negocio a través de la red, realmente no tenemos muy claro el impacto que posee este tipo de publicidad en futuros usuarios. Por ello, hemos hecho una lista con siete de los muchos beneficios de la publicidad online que puede suponer elegir este sistema para enriquecer la comunicación empresarial e institucional.
1.- Mayor alcance por menos dinero. Si comparásemos el presupuesto de cualquier medio tradicional y los números obtenidos con una publicidad y otra, nos daremos cuenta enseguida de que es bastante económico emplear procedimientos digitales, porque alcanza a más personas con un nivel de gastos inferior.
2.- Ahorra también en tiempo. Toda campaña publicitaria lleva consigo una importante tarea de planificación. Sin embargo, la ejecución de la publicidad online es muy rápida. En unos minutos podemos crear una serie de anuncios en varias plataformas y publicarlos casi al instante.
3.- Interactúa. Otra de las grandes ventajas de esta disciplina es que podemos interactuar con el usuario. No solo haciendo partícipe al público que nos sigue para que sea parte del proceso, sino conociendo el feedback que se genera con ellos, así como todo lo que se comenta de nosotros.
4.- Quien toca primero, gana. La velocidad de Internet es vertiginosa en todos los sentidos. Por este motivo, se necesita una buena organización para lograr una estrategia adecuada que consiga resultados fiables de la manera más veloz posible.
5.- Llega a quien te interesa. La capacidad para escoger el público al que queremos lanzar nuestro mensaje ya sea por sexo, intereses, edades o, incluso, zona geográfica, puede ser determinante a la hora de triunfar, puesto que podemos atraer a los consumidores que consideremos más adecuados para la actividad que desarrollamos.
6.- Rendimiento exacto y medible. Todas las vías dedicadas a este inmenso universo cuentan con instrumentos para que podamos comprobar la repercusión de forma prácticamente instantánea y del modo más preciso, con cifras concretas por día, publicaciones, reacciones, etc.
7.- Todos los formatos son bienvenidos. La publicidad virtual es verdaderamente flexible, ya que permite incluir tanto imágenes, como video o texto, adaptándose al target y al contenido que queremos mostrar. La creatividad es infinita y lo mismo ocurre con las posibilidades de un post, si se emplean el horario y táctica apropiados.
Adriana Rodríguez Sánchez-Cerrudo
@columnazero