
Ospina Abogados consigue el archivo de un procedimiento contra un investigado que denunció el robo de su teléfono móvil y fue detenido por la Policía por un presunto delito de simulación de delito y estafa.
El kafkiano suceso tuvo lugar el pasado mes de abril en el distrito madrileño de Arganzuela. El investigado, J.T. se personó en comisaría para denunciar el robo de su terminal móvil por un grupo de individuos que le acorralaron a la salida del metro, amenazándole con distintas armas blancas.
A los pocos días, el investigado recibió una llamada de la comisaría del distrito, notificándole de la necesidad de volver a personarse, esta vez, en presencia de su abogado. En un primer momento, el implicado pensó que los agentes habrían encontrado su dispositivo o que la citación sería para realizar una rueda de reconocimiento de los sospechosos.
Sin embargo, al llegar a comisaría, la situación se convirtió en surrealista cuando uno de los agentes coaccionó al investigado para que reconociese que los hechos nunca habían tenido lugar y que su objetivo era denunciar un falso robo con fuerza para cobrar el seguro del teléfono móvil.
Ante esta situación J.T. negó en todo momento cualquier tipo de simulación de delito e insistió en que su seguro a todo riesgo le cubría cualquier tipo de extravío, por lo que no sería necesario denunciar un falso robo. Aún así, y ante la falta completa de evidencias, los agentes detuvieron al investigado. Tras varias horas de incomunicación, los letrados de Ospina Abogados denunciaron la situación de su cliente ante los oficiales del Cuerpo Nacional de Policía y tras la lectura de sus derechos, este fue puesto en libertad.
Una vez se llevó la causa al juzgado por presunto delito de estafa y simulación de delito, el investigado volvió a negar los hechos. La defensa a cargo del abogado penalista Juan Gonzalo Ospina solicitó la recuperación de los vídeos de seguridad del metro, como garantía de que el robo había tenido lugar. También se requirió la práctica de otras diligencias como la geolocalización del teléfono y el testimonio de los agentes, interesándose el letrado por el archivo del procedimiento.
Finalizada la investigación, el Juzgado de Instrucción Nº1 de Madrid ha admitido la petición de Ospina, decretando el archivo de la causa al no encontrar evidencias contrarias a la versión del investigado y al no quedar acreditado indicio incriminatorio alguno.
Hemos contactado con la defensa del procedimiento, quien ha respondido a las preguntas de este diario:
“Para nuestro cliente, la mala experiencia de una detención policial injustificada será algo complicado de superar. Procederemos con la interposición de acciones legales contra los agentes implicados, con el objetivo de esclarecer la actuación policial. La profesionalidad de nuestros Cuerpos de Seguridad es incuestionable. Aun así, algo ha fallado en estas circunstancias.”
Equipo ColumnaZero